Señor director:
Nos gustaría sumarnos a la conversación sobre innovaciones en educación que surgió en este espacio, ya que en 2023 continuaremos con el desafío de recuperar aprendizajes y promover la asistencia a clases para revertir las preocupantes cifras de este año.
Sin duda, quienes tendrán el mayor peso serán los equipos educativos, que en 2022 ya vislumbraron posibles mejoras para aportar a los aprendizajes y bienestar de sus estudiantes en este contexto de postpandemia.
Prueba de ello es lo que hemos visto en la Red de Mejoramiento Un Buen Comienzo, que busca potenciar el desarrollo integral de más de 6 mil niñas y niños de educación parvularia. A través de un modelo simple, pero riguroso, educadoras y técnicos en párvulos han podido probar ideas que responden a sus problemáticas, midiendo los resultados de manera de saber si los cambios que introducen resultan en una mejora.
Así por ejemplo han incorporado estrategias como el mindfulness y Aprendizaje Basado en Proyectos que han impactado en los aprendizajes y bienestar de sus estudiantes. Esto es solo una muestra, pero queremos decir que estamos a tiempo de apoyar este tipo de iniciativas, promover otras y crear una cultura de innovación con los recursos y materiales disponibles.
Creemos que esto será una de las clave en 2023. Así como también lo será que todas y todos aportemos desde nuestro lugar, apoyando a las niñas y niños sin dejar que la responsabilidad recaiga exclusivamente en las escuelas y familias.
Marcela Marzolo
Directora Ejecutiva
Fundación Educacional Oportunidad