El líder del magisterio dijo que las movilizaciones seguirán «mientras no veamos que los problemas que tenemos sean resueltos por la autoridad».
Las movilizaciones de los docentes del país, incluyendo el anunciado paro nacional para el regreso de las vacaciones de invierno, no se detendrán “mientras no veamos que los problemas que tenemos sean resueltos por la autoridad“, aseguró este sábado el presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz.
De acuerdo a lo manifestado por el dirigente gremial, la decisión adoptada el viernes busca presionar al gobierno para que entregue respuestas a sus demandas no resultas, como la deuda histórica con los docentes, el bono de retito y el agobio laboral, entre otros.
Carlos Díaz afirmó que los profesores continúan con la mejor disposición para “dialogar las veces que el Ministerio (de Educación) lo desee para ver los temas que están pendientes“.
Sin embargo, el presidente del Colegio de Profesores recalcó que luego de “más de un año de negociaciones con este gobierno”, los avances han sido escasos.
Llevamos más de un año expresando las problemáticas que hoy siguen inconclusas, siguen sin responder. Hablamos de un gobierno que además en su programa tiene precisamente respuestas claras respecto a los puntos que estamos nosotros expresando”, manifestó el dirigente.
El paro va
Según planteó Díaz, “esperamos conversaciones para poder resolver las problemáticas, pero el paro del 26 de julio nosotros no lo vamos a bajar“.
“Creemos que es fundamental avanzar, a menos que el gobierno dé respuesta satisfactoria a lo que hoy hemos venido pidiendo“, aseguró Díaz en conversación con radio Cooperativa.
El dirigente de los profesores explicó que el paro nacional de los docentes está convocado para el próximo 26 de julio.
“Faltan todavía muchas semanas, por tanto la posibilidad de que esta situación se pueda revertir la tiene el Gobierno, respondiendo y dando solución a los problemas que hemos venido planteando”, manifestó.
“Tampoco vamos a iniciar con un paro indefinido. Estamos planteando un paro progresivo, que tiene primero un llamado de 24 horas con un estado de alerta. Posteriormente viene un paro de 48 horas y si seguimos todavía sin soluciones concretas, vamos al paro indefinido”, adelantó Carlos Díaz.
